Cada vez más aficionados a la lectura se pasan al libro electrónico. Llevar un libro gordo en el metro o en el autobús será dentro de poco cosa del pasado, ya que la ligereza de estos nuevos dispositivos es una de las ventajas determinantes para decidirse a abandonar el papel. Pero conviene conocer qué llevan los mejores lectores de libros electrónicos o e-readers antes de dar el paso. Aquí tienes todas las claves.
Lo primero es saber distinguir entre una tablet y un e-reader. Aunque el primer dispositivo permite, sin duda, leer un libro, no es aconsejable la lectura habitual en uno de ellos, ya que las prestaciones de su pantalla nada tienen que ver con las del lector de libros electrónicos. Digamos que la tablet es un dispositivo más multimedia, ideal para consultar el correo, leer blogs y prensa, ver vídeos y escuchar música, todo con el mismo gadget.
Peso y volumen
Una de las principales ventajas de los lectores de libros electrónicos es su ligereza, en comparación con la de un libro tradicional o incluso una revista. Hay que tener en cuenta que estos e-readers permiten llevar encima no un solo libro, sino incluir toda una biblioteca en ellos, ya que su capacidad de almacenamiento (habitualmente 2 gb) alcanza los 1.500 libros. El más ligero es el Kindle de Amazon, que pesa tan sólo 170 g y es tan fino como un lápiz.
Conectividad y formatos de lectura
Además de observar el peso y que sea extrafino, es muy importante centrarse en la conectividad que ofrecen los lectores de e-books y que dispongan de conexión Wi-Fi. En caso de disponer de ella la descarga de un libro electrónico de una de las múltiples librerías que los ofrecen online no tardará más de un minuto. Y el precio de los e-books es ya inferior al del libro de papel, y se supone que bajando… Se calcula que con la compra de quince e-books se amortiza ya el gasto en el dispositivo.
Si el ebook no dispone de conexión Wi-Fi, entonces la descarga habrá de realizarse siempre por un ordenador, para luego pasarla al lector; si vas a comprar o regalar uno de estos gadgets, consíderalo ya un atraso si el destinatario es un lector de medio a avanzado.
Hay que tener en cuenta también qué tipo de archivos es capaz de leer cada dispositivo. El famoso Kindle de Amazon sólo puede leer el formato AZW, exclusivo de esta tienda online. Otros lectores admiten archivos de código libre (llamados ePub), y con ellos se puede acceder a una mayor variedad de títulos o al menos a títulos de las más variadas procedencias. En cualquiera es posible consultar un documento en pdf.
Pantalla
Se ha generalizado la pantalla de 6”, pero aún así hay que fijarse en si es táctil y en su nivel de contraste, ya que será determinante para poder leer tanto en la calle como en casa, sin posibilidad de que los reflejos lo impidan. También es interesante que permita elegir entre varias fuentes de letra diferentes para poder adaptar el libro a aquella con la que más nos guste leer. Marcadores y notas son pequeñas herramientas que ya contemplan todos los lectores, al igual que diccionarios de la RAE y Oxford, posibilidad de escoger idioma, etc.
Autonomía
Otro capítulo muy importante es la autonomía de la batería, ya que mientras algunos dispositivos pueden funcionar sin necesidad de recarga durante un mes, la mayoría necesitan conectarse cada quince días (8.000 páginas estimadas), mientras los peores apenas aguantan unas horas.
Tiendas online
Es curioso constatar como nuestras preferencias por una u otra librería pueden llegar a condicionar la compra de uno u otro lector de libros electrónicos. Tanto Amazon como Fnac y Casa del Libro han lanzado su propio modelo con características diferenciadas. Mientras que el Kindle de Amazon se ha impuesto por precio (sólo 99 euros), por peso (170 g), por duración de batería (un mes con el wifi desactivado) y por resolución de pantalla (pese a que no es táctil), los e-readers de las librerías competidoras también disponen de ventajas frente al gigante online norteamericano: por ejemplo, sus dos equipos disponen de sonido, lo que permite escuchar audiolibros y archivos mp3. Pero el Tagus de Casa del Libro pesa 224 g y cuesta 119 euros, mientras que el e-reader de Fnac se sitúa en el rango más elevado de peso, con 244 gramos, y de precio, con sus 129 euros.
Sony, el gran competidor
Otra posibilidad que no hay que descartar es el lector de libros de Sony, PRS-T1, con autonomía de un mes, misma capacidad (2 gB) y pantalla táctil de 6”, pero un peso de 280 gramos (con tapa) y el precio más elevado de todos: 199 euros. Otra desventaja, que parece que pronto se paliará es que aún no está disponible la tienda online de Sony en España.
Más artículos de: Informes
Categorías: Electrónica de consumo
Publicado el: 28-12-2011 | Autor: María Tebar