Tipos de alarmas

Contar con una alarma en casa es cada vez más habitual. Es un sistema eficaz para proteger las viviendas frente a los intrusos al salir a trabajar, durante las vacaciones o por las noches en el caso de viviendas unifamiliares con múltiples flancos débiles. Puedes elegir un kit para instalar tú mismo y controlar desde el móvil o el ordenador o bien optar por uno de los equipos conectados a central de alarmas que ofrecen las casas de seguridad.

Imagen Tipos de ala

Las razones por las que se ha multiplicado la instalación de alarmas en las viviendas son variadas… Por un lado, ha crecido la sensación de inseguridad en los nuevos barrios de las urbes donde los vecinos sólo pernoctan. Por otro lado, las viviendas antiguas en el centro de las ciudades se han llenado  de  oficinas y vaciado de residentes: los pocos que quedan se sienten más "arropados" por la noche con seguridad extra. Y además, han proliferado en torno a las grandes ciudades pequeñas casas unifamiliares con múltiples puntos de acceso.

Todos estos factores han creado una nueva demanda de servicios de seguridad económicos que la expansión de la telefonía móvil y de los servicios de internet  han venido a llenar en pocos años... Si antes sólo las residencias de algunos privilegiados y los negocios situados en naves y locales comerciales podían contar con una alarma, hoy su montaje se ha extendido a todo tipo de usuarios domésticos.

Ahora bien, para satisfacer esta demanda el mercado se ha llenado de alternativas, y decidirse es más complicado de lo que parece...

¿Kit de alarma personal o conectado a central?

La primera elección es básica: ¿kit de alarma personal o alarma conectada a central? Se trata de elegir entre dos modelos de seguridad: la alarma que instala uno mismo y que se paga de una vez o la alarma que proporcionan grandes empresas de seguridad, a menudo sin coste a priori, que instalan ellos mismos y que exige el pago de una cuota mensual. Hay que pensarlo bien, porque llega un momento en que, amortizado el coste de la alarma y la instalación, la cuota que se paga  (unos 40 €/mes, aproximadamente) puede llegar a “doler” al bolsillo.

Prestaciones similares

Las prestaciones de ambos tipos de alarma son similares. Los carteles en lugares visibles actúan de forma disuasoria. En caso de detectar una instrusión, suena una sirena en el interior hasta que se desarma el sistema (introduciendo las claves en el teclado alfanumérico, por mando a distancia o llave electrónica o remotamente a través del móvil).  Además, se produce un aviso telefónico. Los actuales equipos son inalámbricos y sólo precisan disponer de cobertura GSM para alertar de una intrusión. Ya todos incorporan tarjeta SIM con un número de teléfono móvil para evitar que el corte de la línea telefónica deje la casa sin protección.

En el caso del kit de montaje personal, el aviso llega mediante llamada automática o SMS al usuario, que puede optar por visualizar su casa mediante cámara IP. En el caso de alarma conectada a central de seguridad, ésta recibe la alerta y conecta con la casa (vídeo o voz) por si se trata de una falsa alarma; de no recibir respuesta o una contraseña incorrecta, el personal de seguridad opta entre llamar a los teléfonos facilitados o dar aviso a la policía.

Imagen Tipos de ala

Mantenimiento del equipo

Los kits de montaje personal requieren un mantenimiento por parte del usuario (los sensores, al ser inalámbricos, funcionan a pilas). El usuario también debe hacerse cargo de posibles averías y reparaciones del sistema. Las alarmas que instalan las grandes empresas de seguridad incluyen mantenimiento y reparación.

¿De qué se compone un sistema de alarma?

Básicamente se compone de una central GSM (con tarjeta SIM de telefonía móvil), varios sensores de detección de movimiento, teclado inalámbrico y mandos a distancia. Puede incorporar un sensor magnético para puertas /ventanas y detectores de humo, gas o agua.

También existen kits de seguridad perimetral con detección de imagen, para terrazas y jardines. Y los sistemas más modernos incluyen llaves electrónicas que se aproximan a un lector para activar/desactivar la alarma, y que son útiles también para controlar horarios de personal de servicio. Los más tecnológicos pueden disfrutar también de muchas funciones avanzadas desde el móvil o el ordenador.

Todos los equipos incorporan ya una batería interna de apoyo (de litio), capaz de funcionar independientemente si falla la corriente eléctrica.

Ventajas de la alarma personal y de la alarma conectada a central

Las principales ventajas que ofrecen los kits de montaje personal son: ausencia de cuotas y autogestión. El usuario puede armar y desarmar el sistema de forma remota con sólo una llamada desde el móvil, además de guardar varios teléfonos para avisar, programar el tiempo de retardo de activación de la alarma…

La ventaja de las alarmas domésticas conectadas a central es que uno se desentiende de su mantenimiento y autogestión, dejando en manos de expertos la gestión de las alertas. Disponen de función pánico para contactar inmediatamente con la central y ofrecen posibilidad de avisar si fuerzan a uno a desconectar su propia alarma.

Precios de las alarmas

  • Kit personal: de 250 euros a 450 euros (en función de número de sensores y tipo de detección, número de mandos a distancia, etc.).
  • Alarma conectada a central de alarmas: 40 € de cuota mensual, incluida amortización del equipo y mantenimiento. Más sofisticada, con seguridad perimetral y envío de imágenes a central, 100 €/,mes. Kits de videovigilancia avanzada, 30 €/mes más.

Fotografías: Prosegur, Trablisa. Home Security Systems

Más artículos de: Informes

Publicado el: 21-03-2012 | Autor: María Tebar

Publicidad

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR