El azul y el blanco es una de las combinaciones más utilizadas en el cuarto de baño. Lo es porque no conlleva un riesgo excesivo, porque el azul es el color con el que se representa el agua y sobre todo porque es una combinación que trasmite una necesaria sensación aséptica.
Pero además de todo eso, en ese baño destaca la utilización del “2” como base de la decoración.
Dos espejos, dos lavabos, dos cajones, dos baldas, dos alfombras, dos grifos… la excepción que confirma la regla son las 3 lámparas de papel situadas en uno de los lados.
El diseño de la grifería es el resumen perfecto de la decoración buscada en este baño. Una decoración simple y discreta que busca sobre todo que el baño trasmita una sensación limpia y ordenada.
Fotografías: Lasa Idea